El canciller de Rusia, Serguéi Lavrov, afirmó que la acusación contra los palestinos de ser responsables de la violencia en la Franja de Gaza es una "aberración".

"De ninguna forma podemos aceptar que decenas de civiles, incluidos niños, entre ellos bebés, asesinados en los referidos enfrentamientos sean considerados terroristas", aseguró Lavrov que agregó: "Eso es una declaración aberrada llamada a evadir la plática seria y sincera sobre la esencia de problemas".

A pesar de los más de 60 fallecidos y 2.000 heridos en Gaza, la representante permanente de EE.UU. ante la ONU, Nikki Haley, aseguró que Israel actúa con moderación y culpó de las muertes al Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (Hamas).

Además, Haley acusó al movimiento de incitar a la violencia y "arriesgar la vida de los palestinos" antes de que EE.UU. trasladara su embajada desde Tel Aviv hacia Jerusalén, luego de declarar esta ciudad palestina capital de Israel.

"La situación en los territorios palestinos nos alarma profundamente, incluida la situación en la Franja de Gaza, que se encuentra prácticamente bajo un bloqueo", declaró el diplomático eslavo que se comprometió a contribuir en nombre de Rusia con la realización de un diálogo entre Israel y Palestina.

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Lavrov consideró que en Gaza existen radicales, entre ellos Hamas y el Movimiento por la Liberación Nacional de Palestina, que se oponen a un acuerdo para restablecer la unidad palestina y defienden la agudización de la situación.