El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, denunció este lunes ante el Consejo de Seguridad de la ONU el suministro de armas a Ucrania por parte de Occidente, lo que calificó de “insensato”.

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"La realidad es que, a pesar del completo fracaso de las Fuerzas Armadas ucranianas en el campo de batalla, los patrocinadores occidentales del régimen de Kiev siguen empujándolo con persistencia maníaca a continuar el enfrentamiento militar sin sentido", señaló el canciller.

En este sentido, Lavrov destacó que las autoridades ucranianas revenden en el mercado negro parte de las armas suministradas por Occidente en aras de “un esfuerzo por maximizar los beneficios del conflicto”.

El titular diplomático ruso enfatizó que estas armas, revendidas hasta en criptomonedas en la denominada “Web oscura”, caen en manos de grupos terroristas en África, Oriente Medio y América Latina.

De igual forma, apuntó que las armas suministradas, por quienes denominó “mercaderes de la muerte”, son utilizadas por Ucrania para atacar de forma “metódica, despiadada y deliberada objetivos puramente civiles”.

A su vez, Lavrov subrayó que si Ucrania dejara de combatir se salvarían las vidas de cientos de miles de personas, quienes, aseguró, son capturados por Kiev, que los utiliza como “carne de cañón para que mueran por los intereses geopolíticos occidentales”.

A partir de ello, el ministro de Exteriores ruso recalcó que el factor fundamental que obstaculiza búsqueda de una solución pacífica a la crisis ucraniana constituye “el continuo apoyo de Occidente al régimen de Kiev”.

Por su parte, aseveró que Moscú nunca ha renunciado al diálogo al expresar que “siempre nos hemos mantenido dispuestos a negociar". No obstante, apuntó que la propuesta de paz presentada por el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, es “un camino a ninguna parte”.