Fuertes lluvias e inundaciones afectaron en la madrugada de viernes a sábado el municipio Angra dos Reis, al sur del estado brasileño de Río de Janeiro, y causaron la muerte a dos personas y que otras 300 quedaran sin hogar.

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De acuerdo con el Cuerpo de Bomberos, una pareja de ancianos, que se encontraban en la parte baja de un asilo privado, en el vecindario Bracuí, murieron a consecuencia de la rápida subida del agua, que les impidió escapar. Otras 26 personas pudieron ser rescatadas y fueron llevadas al Hospital Municipal de Japuíba para ser examinadas.

Bracuí fue uno de los barrios más afectados por la crecida. Un total de 300 personas están sin hogar y fueron enviadas a refugios improvisados en escuelas. Según medios locales, en la pasada madrugada llovió 250 mm y en algunas zonas de la ciudad el agua alcanzó más de tres metros de altura por la acción combinada de las precipitaciones y la subida del nivel del mar. 

A juicio de expertos de la Defensa Civil, la cantidad de lluvia caída era la esperada para todo el mes de diciembre. Se prevé que las lluvias intensas continúen durante los próximos días.

La Prefectura de Angra dos Reis decretó este sábado estado de emergencia por 180 días, periodo en que la municipalidad podrá "convocar voluntarios para reforzar las acciones de respuesta a la catástrofe, realizar campañas de recaudación de fondos entre la comunidad y autorizar a los agentes de la Defensa Civil a entrar en los domicilios para prestar asistencia u ordenar la pronta evacuación".

Equipos de saneamiento han permanecido durante más de 15 horas limpiando y despejando carreteras, así como prestando asistencia a residentes afectados.

La Secretaría de Estado de Desenvolvimiento Social y Derechos Humanos informó que envió a la localidad 500 cestas de alimentos e igual cantidad de kits de higiene, kits de limpieza, garrafas de agua potable y colchones.