La ciudad de Sao Luis, capital del estado de Maranhao (noreste de Brasil), implantó este martes el cierre total de sus actividades económicas, con excepción de los servicios básicos.

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La medida, que afecta a Sao Luis y a otras tres ciudades de su área metropolitana, fue tomada por la Justicia la semana pasada. El Gobierno estadual la refrendó la medida mediante un decreto, asimismo, las autoridades informaron que el cierre de las actividades económicas durará diez días.

Las farmacias, ferias y mercados seguirán abiertos para que la población se abastezca, pero tanto el personal como los clientes deberán usar máscara, y solo podrá ir a comprar una persona por familia.

La medida contempla además que quienes trabajen en servicios básicos (como el personal sanitario, de seguridad o limpieza) deberán portar una declaración firmada de la empresa para circular por la calle.

De acuerdo con un estudio de la Fundación Oswaldo Cruz, Maranhao es el estado con mayor rítmo de crecimiento en número de muertos por Covid-19 en el país.

La Secretaría de Salud del Gobierno estadual de la ciudad de Sao Luis, reportó hasta el pasado lunes 4.530 personas infectadas, 271 muertes y 1.115 recuperados.

Ninguna región o ciudad brasileña había adoptado hasta ahora una medida tan radical, pero en los últimos días los gobernadores de Río de Janeiro (sureste), Pernambuco (noreste) y Pará (norte) admitieron que podrían adoptar restricciones similares.