La Policía de Bolivia incautó 8.7 toneladas de cocaína impregnada en tableros de madera para pisos que serían enviados a Países Bajos, en la que es considerada la mayor incautación de dicha sustancia en la historia de esa nación suramericana.

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El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, dio a conocer este viernes durante una conferencia de prensa celebrada en la ciudad de Oruro que las autoridades perfilaron el cargamento el pasado 26 de diciembre y comenzaron a profundizar en la actividad de la empresa industrial a cargo del alijo, denominada Maexa Srl.

El funcionario mostró a los medios muestras del clorhidrato de cocaína incautado, cuyo valor estimado, de llegar a puertos europeos, sería 526 millones de dólares.

Del Castillo aseguró que se trata de la incautación de cocaína más grande en la historia del país. "Estamos hablando de la incautación de cocaína más grande en la historia de nuestro país", enfatizó.

Explicó que ello fue posible luego de investigaciones desarrolladas durante dos meses por el grupo de inteligencia de la Fuerza Especial de Lucha contra el Crimen (Felcn).

Precisó que la carga decomisada iba a salir de Bolivia a bordo de un camión a través del paso fronterizo de Tambo Quemado. Añadió que luego, mediante vía Chile-Perú-Panamá-Bélgica, llegaría a Países Bajos. 

En paralelo con el hallazgo, se realizaron durante los últimos días nueve allanamientos y cuatro detenciones en varias ciudades bolivianas.

Entre los detenidos se hallan el chofer del camión interceptado, el dueño de Maexa Srl y el propietario de la mercancía que sería exportada, todos nacionales, además de un ciudadano colombiano que camuflaba la droga en la madera.

Al referirse al hecho a través de las redes sociales, el presidente Luis Arce destacó la actuación de las autoridades y afirmó que su Gobierno, a través de un trabajo comprometido, consigue "resultados históricos en la lucha contra el narcotráfico".