La Defensa Civil de Bolivia reportó que al menos 60.000 familias resultan afectadas y 22 han fallecido por deslaves, inundaciones y otros desastres causados por las intensas lluvias de los últimos meses.

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Respecto a los decesos, la institución estatal arrojó que este dígito puede subir porque aún se contabilizan diez personas como desaparecidas.

Las autoridades pormenorizaron que del total de damnificados, más de 10.000 familias terminaron en condición de desplazadas de su hogar a causa de la destrucción de sus viviendas.

Igualmente, el ente reveló que un tercio de los más de 300 municipios de Bolivia enfrentan un exceso de precipitaciones con inundaciones y desbordes de ríos.

Respecto a los daños en la agricultura, la Defensa Civil subrayó que cerca de 300.000 hectáreas de cultivos han sido afectadas por las lluvias.

Ante esta situación grave con las precipitaciones el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes afirmó que se prepara un plan de contingencia para enfrentar la segunda temporada lluviosa.

Calvimontes detalló que se encuentran inmersos en una serie de reuniones por municipios para crear un mecanismo o coordinación que permita enfrentar la venidera temporada lluviosa que, según vaticinó, puede ocasionar daños en varias regiones de la nación.

Para esta etapa en la que se prevé que los Departamentos más afectados sean La Paz, Beni, Santa Cruz, Cochabamba y Potosí.