¿Por qué el presidente argentino propone el proyecto de emergencia económica?
De ser aprobada la declaratoria de emergencia económica, el Ejecutivo tendría facultades especiales hasta el 31 de diciembre de 2020.
El Congreso de Argentina comienza este miércoles el análisis para su eventual aprobación de un proyecto de emergencia económica, sanitaria y alimentaria propuesto por el presidente Alberto Fernández, quien recién asumió el cargo el pasado 10 de diciembre.
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Con esta ambiciosa iniciativa, la cual el flamante mandatario desea que los legisladores le den un trámite exprés, el Gobierno busca hacer frente a la grave crisis económica, con una elevada inflación, que dejó la anterior administración de Mauricio Macri.
El proyecto se denomina "Solidaridad Social y Reactivación Productiva" y prevé alzas de impuestos para financiar al Tesoro, con miras a lograr la recuperación de ingresos de los sectores más vulnerables e impulsar el deprimido mercado doméstico.
Reducir la desigualdad
El ministro de Economía, Martín Guzmán, en declaraciones a la prensa ayer martes calificó la iniciativa como "el primer paso para resolver la crisis económica y social".
En el punto de la Seguridad Social, la iniciativa de ley establece la suspensión por 180 días en la movilidad previsional. En este periodo, los aumentos de las jubilaciones serán fijados trimestralmente por el Ejecutivo.
De ser aprobada la declaratoria de emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, administrativa, previsional, tarifaria, energética, sanitaria y social, el Ejecutivo tendría facultades especiales hasta el 31 de diciembre de 2020.
Asimismo, el mandatario Fernández iniciaría negociaciones con los acreedores para "recuperar y asegurar" la sostenibilidad de la deuda externa, la cual asciende a unos 330 mil millones de dólares, según el Banco Central.
Además, el Gobierno estaría autorizado a emitir letras a diez años, por un total de cuatro mil 571 millones de dólares, y a adquirir dólares provenientes de las reservas del Banco Central con el propósito de destinarlos al pago del débito externo.
En el capítulo tributario, habrá 11 grandes reformas, entre las más importantes, resalta el aumento en las retenciones a la soya, maíz y trigo, el impuesto a los bienes personales y el recargo sobre la compra de dólares. Además, se decreta el congelamiento de las tarifas de los servicios de energía eléctrica y gas.
El ministro Guzmán explicó que se creará el “Impuesto para una Argentina Inclusiva y Solidaria (PAIS), que puede resumirse en el recargo sobre varias operaciones en divisas: desde la compra de moneda extranjera (y cheque de viajeros), hasta el pago de bienes y servicios en el exterior, extracciones de efectivo en el exterior y compras a través de plataformas digitales.
Habrá un régimen de reintegros de IVA para personas y pequeños contribuyentes. “La idea es alcanzar a los sectores más postergados de la economía. Para las empresas además habrá planes para regularizar sus deudas y así puedan crecer y generar empleo”, externó Guzmán.