El presidente de Bolivia, Luis Arce, entregó este martes en el municipio de Anzaldo, departamento de Cochabamba, la ampliación de la represa Tijraska con una inversión de 16.5 millones de pesos bolivianos (unos 2.4 millones de dólares), con el fin de garantizar agua para el fortalecimiento agrícola de la región.

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El presidente Arce explicó que este y otros proyectos similares buscan enfrentar la crisis climática. “Este proyecto es muy importante, porque busca garantizar el agua para la producción ante los efectos de la crisis climática, que -lamentablemente- llegó a Bolivia”, afirmó en un masivo acto de entrega.

La obra demandó una inversión de 16.5 millones de bolivianos, de los cuales el Gobierno nacional financió el 85 por ciento, y la gobernación y alcaldía el 15 restante, como contraparte local. La represa está destinada a fortalecer la producción de trigo, papa, maíz, papalisa, arveja, quinoa, fruta, yuca, entre otros productos. Además, cuenta con cámaras de distribución de agua, pasos de quebradas, tomas de agua y tuberías para el riego de cultivos.

Asimismo, en el municipio cochabambino de Capinota, Arce inauguró este martes cuatro modernos sistemas de agua subterránea para regar más de 350 hectáreas de cultivos en las comunidades de Toctawi, Pampa Capinota, Calicanto y Ticti Falsuri.

“Nosotros hemos visto en Capinota un enorme potencial para producir y aumentar la productividad. Ustedes se lo merecen, son grandes productores, lo hemos visto, conocemos de su capacidad productora, y les venimos a decir que tienen en el Gobierno nacional al mejor de sus aliados”, afirmó.

Capinota continuará garantizando la seguridad y soberanía alimentaria. Para contribuir en ese objetivo, el presidente anunció el inicio de la construcción de la Planta de Agroinsumos, que producirá fertilizantes y abonos para dejar de depender de las importaciones para la actividad agrícola.