La canciller de Alemania, Angela Merkel, anunció este domingo que no venderá armas a Arabia Saudita hasta que se esclarezcan todas las incógnitas que rodean el caso del asesinato del periodista Jamal Khashoggi en el consulado saudí en Estambul, Turquía. 

La líder de Unión Cristianodemócrata (CDU) sostuvo desde la sede de su partido que está de acuerdo "con quienes dicen que no puede haber exportaciones de armas (hacia Arabia Saudita) en la situación actual, incluso si se trata de ventas de una amplitud limitada". 

Merkel, quien condenó el asesinato en los "términos más firmes", dijo que "hay una necesidad urgente de aclarar lo que sucedió: estamos muy lejos de que esto se haya aclarado y de que se responsabilice a los responsables (...) En lo que respecta a las exportaciones de armas, estas no pueden darse en las circunstancias actuales".

Alemania, que había autorizado venta de armas a Arabia Saudita por más de 400 millones de euros (más de 460 millones de dólares) entre enero y septiembre de este año, coincidió de forma conjunta con Reino Unido y Francia en que existe "una necesidad urgente de aclaración" sobre las circunstancias de la "inaceptable" muerte del periodista. 

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Los tres países pertenecientes a la Unión Europea (EU) exhortan al Reino de Riad a que "más allá de las hipótesis hasta ahora mencionadas por la investigación saudita, (...) tienen que ser respaldadas por hechos para ser consideradas como creíbles". 

"En último término, emitiremos nuestro juicio en función de la credibilidad de la explicación adicional que recibamos sobre lo que sucedió y nuestra confianza en que un evento tan vergonzoso no podrá repetirse ni nunca lo hará", indica la nota del comunicado conjunto. 

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