Este jueves se cumplen 300 años de la tradición del Corpus Christi (cuerpo y sangre de Cristo) en Venezuela, a propósito de la celebración, el canciller venezolano, Elías Jaua, asistió a la reinauguración de la Casa de los Diablos Danzantes de Yare en el estado Miranda (centro-norte).

Jaua destacó que conservar las manifestaciones del Patrimonio Inmaterial Cultural de la Humanidad es prioridad del gobierno de calle promovido por el dignatario venezolano  Nicolás Maduro.

Además destacó el plan de salvaguarda de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco, por su sigla en inglés), que está encaminado a rehabilitar y mantener todas las cofradías de los Diablos de Corpus Christi.

Las fiestas de acento africano e indígena, con marcado sincretismo católico por el tributo a la ceremonia del Corpus Christi, se celebran del 18 al 20 de junio por todo el país.

La tradición se remonta a un tiempo de intensa sequía en la época colonial que llevó a los devotos católicos a pedir lluvias y buenas cosechas en la ceremonia del Corpus Christi.

La Unesco declaró Patrimonio Cultural Intangible de la Humanidad a los Diablos Danzantes en diciembre de 2012, luego de 10 años de evaluación y documentación ante la organización internacional, coordinados por el Instituto de Patrimonio Cultural de Caracas.