Rusia reabrió tres puestos de control de frontera en la sureña región de Rostov, limítrofe con Ucrania, tras casi más de una semana interrumpidos por ataques de morteros desde el otro lado de la frontera.

Así lo informó el representante de la dirección de Fronteras del Servicio Federal de Seguridad en Rostov, Vasili Malaev, sobre los puntos permanentes de paso vehicular en "Donetsk", "Gúkovo" y "Novoshájtinsk".

Los tres puestos cerraron a inicios de mes luego de reiterados ataques con artillería pesada, procedentes de territorio de Ucrania.

Mientras que los puntos de "Donetsk" y "Novoshájtinsk", evacuaron su personal desde el jueves por los intensos combates registrados entre las fuerzas regulares ucranianas y las milicias en la localidad de Izvarino, región de Lugansk.