Rusia afirmó este sábado que había expulsado a un submarino estadounidense que se acercaba a sus aguas territoriales el pasado jueves en el mar de Barents (norte), en un incidente en el que no se requirió el uso de fuerza.

"Las patrullas de la flota rusa del Gran Norte identificaron el 7 de agosto un submarino extranjero, a priori de la clase Virginia (de submarinos nucleares de ataque) de la Armada estadounidense", declaró un representante del Estado mayor de la flota rusa, citado bajo condición de anonimato por las agencias de prensa rusas.

"Una formación naval antisubmarinos fue enviada al lugar, al igual que un avión de combate antisubmarinos IL-38", según un responsable.

"El submarino fue expulsado de los alrededores de las aguas territoriales rusas por las maniobras de estas unidades", añadió el responsable, quien precisó que los radares rusos habían seguido durante 27 minutos al navío extranjero, hasta que desapareció.

Es poco frecuente que el Estado mayor ruso informe sobre un incidente de este tipo, ocurrido en un momento en que Rusia y Occidente echan un duro pulso diplomático y económico debido a la situación en Ucrania, donde las regiones de Lugansk y Donetsk luchan por independizarse de Kiev.