Carlo Tavecchio, presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC por siglas en italiano), fue sancionado este martes por la Unión Europea de Fútbol Asociada (UEFA) consecuencia de expresiones abiertamente racistas.

Tavecchio, antes de ser escogido como dirigente de la federación se burló públicamente de los futbolistas africanos. Él eligió un nombre inventado “Opti Poba” para referirse a los jugadores africanos en general. Expresó: “Inglaterra identifica a los jugadores cuando llegan para que solo jueguen profesionales. En nuestro caso, en cambio, puede venir ‘Opti Poba’, que venía comiendo bananas, y de repente convertirse en jugador titular de la Lazio”.

Estos comentarios acerca de los jugadores africanos comiendo bananas apuntan a denigrar a las personas y sus orígenes. Esta es una realidad que se vive en varias plazas del fútbol europeo, por ejemplo, en España un fanático del Villareal le lanzó una banana al jugador del Barcelona, Dani Alves, el que respondió comiéndosela.

La sanción establece que no podrá participar en el congreso de la UEFA que se realizará en marzo de 2015, ni postularse a ningún cargo dentro del ente rector del fútbol europeo. Tavecchio, de 71 años deberá además “organizar un evento especial en Italia para contribuir a incrementar la conciencia y aceptación de los principios de la UEFA contemplados en la resolución fútbol europeo contra el racismo”, agregó la  organización.

La FIGC aceptó la decisión anunciada por la comisión ética en Nyon. Tavecchio se disculpó posteriormente y fue elegido presidente de la FIGC a mediados de agosto. “La decisión no será comentada, pero sí aceptada”, dijo el dirigente, antes de añadir que “nada cambia” en cuanto a su situación como presidente de la FIGC.