El presidente de Bolivia, Evo Morales, continúa atendiendo a los damnificados que dejaron las intensas lluvias en el país. El sábado hizo entrega de equipos para evacuar ganado y alimentos para los hatos en la población de Santa Ana de Yacuma, una de las más afectadas por las inundaciones.

El jefe de Estado donó un remolcador, barcazas y forraje a los pobladores del lugar, con la intención de que protejan su ganado, aunque resaltó que lo más importante es preservar la vida humana.

Asimismo informó que las demandas serán atendidas luego de las fuertes lluvias y riadas, las más intensas de los últimos 30 años en el país.

Morales afirmó que su gobierno está consciente de la difícil situación de la población y del ganado y que se encuentran movilizados para entregar los recursos necesarios.

Luego de superar las inundaciones, el gobierno se ocupará en "soluciones estructurales que eviten en el futuro la pérdida de vidas y de ganado, en una zona eminentemente ganadera", aseguró el mandatario.

Por último pidió trabajar de forma mancomunada en planes de mitigación de los daños a mediano y largo plazo y aseguró que el gobierno garantizará créditos blandos para repoblar el ganado perdido.