La validación de las firmas del 1 por ciento de los electores por estados de Venezuela para el referendo revocatorio en Venezuela se completó. Sin embargo, para la activación del mecanismo de consulta popular hace falta cumplir con nuevos requerimientos o pasos previstos en la normativa electoral del país suramericano.

El Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano analizará ahora los recaudos de la Agrupación de Ciudadano (AC) conformada para la convocatoria del revocatorio. El ente deberá aprobarlo y luego la AC puede solicitar la activación.

Iniciará a partir de entonces un proceso de recolección de firmas equivalente al 20 por ciento de los electores venezolanos de la circunscripción en cada estado del país. Posteriormente, se realizará la verificación y totalización de las manifestaciones de voluntad y, de no cumplirse este porcentaje, el CNE declarará improcedente la solicitud de la consulta.

En caso contrario, se realizará la convocatoria del referendo y en los próximos 90 días deberá celebrarse la consulta.

Entretanto, analistas aseguran que se necesitaría al menos 170 días para, una vez hecha la solicitud, para que sea posible la realización del mismo, sin embargo, advierten que podría demorarse si el jefe de Estado o un elector introduce un recurso o algún aspecto que considere irregular.

Si se completa el lapso establecido, el referendo revocatorio quedaría pautado para el año 2017.

Desde el inicio del proceso para la activación de referendo revocatorio en Venezuela se han reportado irregularidades cometidas por los dirigentes de oposición de este país. 

El CNE ha precisado que de un millón 957 mil 779 rúbricas introducidas por la coalición de partidos de oposición, autoproclamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), unas 605 mil 727 no cumplieron con los criterios establecidos por la norma para iniciar el proceso. 

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De ellas, 307 mil 747 no cumplieron con uno o más criterios y que 97 mil 158 planillas solo contenían datos en un campo:  86 mil 337 solo tenían el nombre y el apellido, 80 mil 105 solo la huella del elector, 18 mil 338 solo el ciudadano a revocar, 7 mil 823 solo el cargo a revocar, mil 805 solo la firma y 396 solo la cédula del elector. 

De este modo, quedaron anuladas aquellas firmas en las que no se llenaron los campos obligatorios de los formularios, que la derecha debía entregar dando constancia de que el proceso había sido transparente.

Entre las irregularidades también había firmas de personas que habían fallecido y refirió que hubo 10 mil 995 de estos casos.