Nube tóxica continúa causando estragos en China
Los altos niveles de contaminación reflejados en una nube tóxica afectan este jueves el tráfico aéreo, con una decena de vuelos demorados, en la provincia de Liaoning (nororiente de China). Asimismo, se reporta el cierre parcial de autopistas en las provincias de Shandong y Hubei (oriente y centro).
Según especialistas, para el próximo fin de semana se espera una masa de aire frío, que dispersaría la peligrosa contaminación que hace irrespirable el aire.
Desde el pasado martes, China mantiene una alerta amarilla a causa de la concentración de peligrosas partículas PM2, 5 de 390 por metro cúbico, de las 25 y las 35 por metro cúbico consideradas seguras para los humanos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las autoridades chinas, respectivamente.
La polución en regiones de China y en particular en su capital, Beijing, han sido una constante desde el inicio de 2014, con períodos críticos durante las celebraciones por la llegada del nuevo año lunar el pasado 31 de enero, que empeoraron la situación por la combustión de pólvora en la quema exagerada de cohetes y fuegos artificiales.
La contaminación se ha convertido en una de las principales preocupaciones del Gobierno chino, ante la frecuencia cada vez mayor de días de contaminación grave, y quejas de los ciudadanos al respecto.
El Gobierno municipal de Beijing anunció en enero pasado un plan de 15 mil millones de yuanes (dos mil 400 millones de dólares) para reducir la contaminación a lo largo de este año.
El Ejecutivo chino enmarca la lucha contra la contaminación dentro de un cambio de modelo económico, basado hasta ahora en un crecimiento a toda costa -incluido el grave perjuicio al medioambiente-, para hacerlo más sostenible y orientarlo al consumo interno.