El presidente de Bolivia, Evo Morales, se pronunció en la Vigésima Conferencia de la Organización de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre Cambio Climático (COP20) que tiene lugar en Lima, Perú. “El cambio climático es uno de los desafíos del mundo”, afirmó al inicio de su discurso.

“El cambio climático amenaza las perspectivas de desarrollo de los países”, alertó el jefe de Estado. 

“Quiero pedir a los gobernantes del mundo escuchar a los pueblos indígenas y seguir su sabiduría de la vida (...) ellos pueden brindar una solución al cambio climático. Hagamos un nuevo acuerdo del cambio climático con una visión anticolonialista”.

En ese orden de ideas, el Mandatario cuestionó que “Gobiernos del Norte se atrasan en decisiones sobre el cambio climático, nuevo acuerdo debe ser anticolonialista (...) países nos han robado desde la época de la colonia, nos roban el futuro de nuestros hijos y de desarrollarnos”.

En ese sentido, instó a “que cumplamos las reglas de los países indígenas: no nos robemos el espacio atmosférico”.

El Presidente boliviano pidió paciencia y tolerancia al manifestar la posición de Bolivia en lo ético y político sobre el cambio climático. “Quiero pedir un acuerdo climático basado en la protección de la vida y madre tierra y no en el mercado, la ganancia y el capitalismo”, dijo.

Acciones mundiales

Durante su alocución en el pleno de la XX conferencia de la ONU sobre el cambio climático, el Presidente de Bolivia se expresó sobre esta problemática mundial señalando que “es uno de los desafíos globales mas grandes de estos tiempos”.

En este sentido afirmó que la convención de la ONU es el foco intergubernamental y primordial de negociación para la respuesta mundial al cambio climático  la cual debe respetar los principios  y objetivos de la convención ajustados a equidad, incluyendo la adaptación y provisión de tecnología.

Morales también precisó la contribución del bloque del G77 mas China en las negociaciones del cambio climático y la visión de solidaridad, cooperación, justicia y equidad, la cual debe ser asumido como un logro importante, “como una visión holística que incluye adaptación y mitigación respetando el derecho de los pueblos”.

Finalmente instó a todos los países asistentes en la cumbre, a evaluar la responsabilidad mayúscula de los países del norte en cuanto a la destrucción de la naturaleza. “Los países en desarrollo hemos servido de pretexto para que los grandes sigan haciendo lo mismo (…) el colonialismo de nuestros pueblos ha continuado incesante por la vía de un presunto acuerdo fallido para reducir las emisiones de dióxido de carbono”.

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La COP entró en vigor en 1994 con el objetivo de reducir las concentraciones de gases de efecto invernadero (GEI) en la atmósfera. La Conferencia de las Partes (COP) fue designada como el órgano supremo de la Convención.