Los mexicanos gastan más en jugos, refrescos, bebidas alcohólicas y cervezas que en alimentos de la canasta básica como tortillas, leche, frutas o huevos, según diversos estudios.

La gastroenteróloga Rosa María Miranda explica que el gasto para el consumo de estas bebidas podría ser superior al 17 por ciento y en el peor de los casos puede alcanzar 175 por ciento, lo que contribuye a desarrollar enfermedades de inflamación intestinal (EII), colitis ulcerativa y la Enfermedad de Crohn.

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Las EII son diagnosticadas en adultos jóvenes entre los 15 y 30 años en México y en los últimos años los especialistas han advertido un incremento en los casos en todo el mundo, especialmente en los países más avanzados y en vías de desarrollo, tendencias asociadas a la industrialización.

La OMS alerta que la mala alimentación puede disminuir la respuesta del sistema inmunológico, alterar el desarrollo físico y mental y aumentar el riesgo de padecer una enfermedad inflamatoria intestinal.

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