Al menos a mil 071 niños colombianos niños colombianos se les ha obstaculizado su futuro por sufrir un ataque de minas antipersonas en poblaciones vulnerables al conflicto armado como las comunidades indígenas.

El director del Programa Presidencial para la Acción Integral contra Minas Antipersonal, Daniel Ávila, dijo que de continuar esta tragedia humanitaria se sumarían 10 mil víctimas, lo que deja al país segundo lugar mundial de naciones con más afectados.

Aunque Ávila defiende las políticas de Gobierno para mitigar el problema en zonas rurales, accidentes de este tipo siguen ocurriendo en comunidades campesinas de las regiones orientales. Sin embargo, resaltó que las campañas antiminas han obtenido leves resultados.

“Tenemos logros en las políticas públicas de asistencia y rehabilitación, pero es cierto que falta mucho por hacer. Pero nos preocupa que aumentaron las víctimas civiles y en especial los menores. Ya son 1.071 los niños y jóvenes las víctimas y el 80 por ciento sobrevivió, y ahora se enfrentan a una discapacidad porque fueron mutilados o quedaron ciegos o sordos”, dijo Ávila.

Las minas antipersonas han sido utilizadas por grupos armados y autodefensas en zonas cocaleras o de otros cultivos ilícitos, así como para limpiar territorios invadidos, desde el inicio del conflicto armado. Según Ávila, a esto se debe el aumento de víctimas civiles, y sobretodo de menores.

Por otro lado, el funcionario destacó que este tema debe estar en la agenda de las negociaciones de paz que el Gobierno y las Fuerzas Revolucionarias de Colombia (Farc) desarrollan desde La Habana para lograr el éxito del desminado humanitario.

"Como ha dicho el vicepresidente Garzón, se requiere buscar acuerdos humanitarios con las Farc mientras se concreta un acuerdo de paz para hacer desminado humanitario en el país; que revelen dónde están estos artefactos y renuncien a su uso”, sostuvo Ávila.

Petición de defensores de derechos humanos

Expertos, defensores de derechos humanos y autoridades durante el primer día de la Conferencia Global de Asistencia a Víctimas de Minas Antipersonal y otros Remanentes Explosivos de Guerra, que sesiona en Medellín, advirtieron este jueves sobre las consecuencias devastadoras de las áreas minadas, aún sin conflicto armado.

En el evento estuvo presente el vicepresidente Angelino Garzón, quien indicó que estos artefactos explosivos prohibidos por el DIH son usados de forma indiscriminada por las guerrillas y obstaculizan el desarrollo social, económico y político de las regiones. Aunque, admitió que el país no logró cumplir compromisos como Estado miembro del Tratado de Otawa (prohíbe la fabricación y uso de minas).

En este sentido, la urgida solicitud de los defensores de derechos humanos se basa en que los grupos armados desistan de instalar esta amenaza por la vida y futuro de miles de niños.