La presidenta de Corea del Sur, Park Geun Hye, actualmente destituida por el Parlamento y sustituida de forma temporal por el primer ministro, Hwang Kyo Ahn, podría ser interrogada personalmente esta semana en el marco de la investigación en su contra por un polémico caso de corrupción que salió a la luz tras la detención el pasado mes de octubre.de una de sus confidentes y amigas

Si bien ha sido llamada a declarar en numerosas ocasiones, la legislación surcoreana no la obliga a hacerlo de forma presencial, por lo que hasta el momento siempre han sido sus abogados los que han testificado ante el equipo de fiscales que investigan la trama corrupta.

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Los investigadores de la comisión especial sobre el escándalo de sobornos y tráfico de influencias en Corea del Sur anunciaron este lunes su intención de interrogar a la presidenta del país, para constatar si participó en una de las tramas de corrupción más importantes de la historia reciente del país.

Un asesor de la Presidencia confirmadó a la agencia surcoreana Yonhap que, efectivamente, es espera que el interrogatorio tenga lugar "antes de que acabe la semana", probablemente entre el jueves o el viernes.

El pasado viernes, un grupo de investigadores intentó entrar precisamente en el Cheong Wa Dae --la Presidencia-- para recopilar datos de cara a este interrogatorio, si bien fueron expulsados del lugar por los agentes de seguridad presentes en el edificio.

Días después, el presidente en funciones rechazó la petición de la Fiscalía especial para que coopere con su plan para realizar el citado registro.

Park está acusada de abuso de poder para beneficiar a su confidente y amiga Choi Soon Sil, que está actualmente en prisión, por medio de presiones a líderes empresariales para que hicieran donaciones a las organizaciones no gubernamentales que gestionaba su amiga.

De ser interrogada --en lo que sería el primer careo desde que se inició la investigación--, se espera que la comisión aborde no sólo su papel en el caso vinculado a Choi, sino también en la creación de una 'lista negra' de artistas y figuras de la cultura contrarias a su Gobierno y en el hundimiento del ferry 'Sewol' de 2014, en el que murieron más de 300 personas.

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El Parlamento surcoreano aprobó el 9 de diciembre un proceso de destitución contra la presidenta, si bien ésta lo ha rechazado y ha apelado la decisión ante el Tribunal Supremo.

La legislatura ha presentado un total de 13 cargos contra Park: cinco violaciones a la Constitución y ocho delitos legales. Ahora el Tribunal Constitucional tiene un total de 180 días para decidir si ratifica la destitución de la presidenta.