El Capítulo México de la Red de intelectuales y artistas en Defensa de la Humanidad emitió este jueves un comunicado en rechazo a la injerencia del Gobierno del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, en los asuntos internos de Venezuela. En el texto exigen que el mandatario se disculpe públicamente con el Gobierno Constitucional del presidente venezolano Nicolás Maduro y con el pueblo de esa nación.

La actitud injerencista asumida por la Cancillería mexicana "viola los principios más elementales del respeto entre Estados y naciones soberanas, al externar juicios de valor distorsionados en torno a la institucionalidad democrática de ese país hermano y cuestionan las atribuciones que tiene el presidente Nicolás Maduro de convocar una Asamblea Nacional Constituyente, decisión amparada en los artículos 348 y 349 de la Constitución vigente", cita el documento.

A su vez, consideró "inaceptable y francamente hipócrita que sea precisamente el Gobierno de Peña Nieto que se atreva a invocar el respeto a los derechos humanos, cuando México tiene un Estado criminal, penetrado por el narcotráfico, la violencia y la impunidad, con 100 mil muertos desde 2012, miles de desaparecidos forzados, torturados, verdaderos presos políticos y un desastre humanitario".

"Con qué cara se demanda respeto a la democracia si México está secuestrado por una corrupción sistémica, corporativismo, fraudes electorales, control mediático, asesinato de cientos de luchadores sociales y periodistas.", agrega el texto.

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Por su parte, el Comité Directivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (Clacso), también condenó, mediante un comunicado, la injerencia externa en Venezuela, "particularmente, la que ejerce el Gobierno norteamericano con sus persistentes y ahora renovadas ambiciones coloniales e imperiales sobre la región".

"Condenamos la actitud irresponsable de algunos Gobiernos latinoamericanos y de organismos multilaterales, como la Organización de Estados Americanos (OEA), quienes, en un momento de extrema tensión y habiendo centenas de vidas en juego, en vez de contribuir a la sensatez y a la reconciliación, exacerban las tensiones, alimentan la voluntad desestabilizadora o la prepotencia de quienes hoy se enfrentan, volviendo a esta gran nación, un verdadero campo de batalla", aseguran en el texto.

A su vez, Clacso expresó su más profunda preocupación por la escalada de violencia que está viviendo Venezuela, "en especial su Gobierno, por parte de monopolios mediáticos que desinforman, distorsionan y ocultan el origen complejo de la profunda crisis vivida", por lo que hizo un llamado "a la paz al diálogo y a la definición de una agenda consensuada de medidas que protejan, en primer lugar y de forma inmediata, la vida de miles de ciudadanos y ciudadanas".

Asimismo, advirtió que el conflicto interno en Venezuela pone en riesgo el orden democrático y de profundizarse "derivará muy probablemente, en más muertes y en una guerra civil que despunta en el horizonte de un horror que podemos y debemos evitar de manera urgente".

"Estamos con la paz. Estamos con el diálogo y con la democracia que se nutre y alimenta de la diversidad y de la divergencia política, no que se derrumba impotente ante ellas", concluyó el Comité.

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