Un grupo de científicos de las universidades de Southampton (Reino Unido) y Edimburgo (Escocia) determinaron que tomar dos tazas de café al día reduce la posibilidad de padecer cirrosis hepática en un 44 por ciento. 

Los científicos estudiaron más de 423 mil casos y concluyeron que la cafeína del café contiene muchos componentes biológicamente activos, incluidos los antioxidantes y agentes antiinflamatorios como el ácido clorogénico, cafestol y caveolae que pueden combatir la cirrosis hepática. 

Sin embargo, los investigadores consideran que es necesario realizar ensayos clínicos sistemáticos para determinar los beneficios del café, además del peligro potencial de la bebida.

“Es importante que los médicos puedan recomendarlo a los pacientes y con plena seguridad”, subraya el estudio publicado en la revista científica Noticias de la Ciencia y la Tecnología.

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La cirrosis hepática es una enfermedad crónica del hígado, la cual causa la muerte progresiva del tejido hepático normal y su sustitución por tejido fibroso.