El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, impuso este lunes el tercer paquete de sanciones contra Rusia por considerar que respalda a las fuerzas independentistas en Lugansk y Donetsk, y advirtió que "los costos seguirán creciendo" si ese país "no cambia su actual camino".

"Si Rusia continúa su actual camino, el coste continuará creciendo", afirmó Obama en la Casa Blanca, sede de Gobierno, tras anunciar el número de penalidades que afectarán el sector energético y petrolero. 

Por su parte, el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, respondió a Occidente por su falta de iniciativa política para resolver la situación en Ucrania. "Se escuchan solo exigencias a Rusia y amenazas de sanciones", apuntó, al tiempo que agregó que "con la excusa de Maidán empezó un proyecto geopolítico para tomar Ucrania". 

Unas horas antes la Unión Europea acordó (UE) imponer a Rusia sanciones económicas que afectan a su industria petrolera y de defensa, a productos de doble uso y a tecnologías sensibles.  

Los embajadores ante la UE acordaron extender la lista de sanciones a otros cuatro empresarios y a cuatro entidades jurídicas, entre ellas a un banco, de acuerdo con la agencia AFP.

Estas nuevas medidas funcionan como mecanismo de presión al presidente ruso, Vladimir Putin, en el marco de la tensión en las relaciones con Ucrania.