Dilma es víctima de un golpe blando asegura Pérez Esquivel
El premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, aseguró este jueves que la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, es víctima de un "golpe blando" que comparte la misma metodología que se llevó a cabo en Paraguay y en Honduras.
Recordó que un juicio político llevó a la destitución al entonces presidente Fernando Lugo, y en Honduras, donde Manuel Zelaya fue derrocado en 2009.
"Los golpes blandos ya se pusieron en práctica en el continente en países como Honduras y Paraguay. Ahora, la misma metodología, que no necesita a las Fuerzas Armadas, se está utilizando aquí en Brasil", manifestó en declaraciones a periodistas a la salida del encuentro con la presidenta de ese país.
Me reuní com a Presidenta .@dilmabr para manifestar meu apoio frente a este golpe de Estado: https://t.co/wo7KTCa9wv pic.twitter.com/5Ksc6ZeIMe
— AdolfoPérez Esquivel (@PrensaPEsquivel) 28 de abril de 2016
#AOVIVO O arg. Adolfo Peres Esquivel, prêmio Nobel da Paz, está no Br denunciando o golpe https://t.co/kb8btmf9vB pic.twitter.com/uxnqS8Ps9F
— Midia NINJA (@MidiaNINJA) 28 de abril de 2016
El premio Nobel de la Paz señaló que la nueva técnica golpista se basa en el "uso de los medios de comunicación para generar descrédito" y después en la "expulsión de la presidenta" lo que supondría "un retroceso muy grande para el continente".
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La visita de Pérez Esquivel se da en medio de una semana crucial para la presidenta brasileña, ya que el Senado ha comenzado a debatir si existen méritos jurídicos para iniciar el juicio político con miras a la destitución de la mandataria.
En contexto
El pasado 17 de abril la Cámara de Diputados de Brasil aprobó el pedido de juicio político contra la presidenta Dilma Rousseff, con 367 votos a favor, 137 en contra, siete abstenciones y dos ausentes.
El pleno de la Cámara de Senadores deberá votar a mediados de mayo si respalda el juicio político que separaría del cargo a Rousseff durante los 180 días que puede durar el proceso y sería sustituida por el vicepresidente Michel Temer, quien completaría el mandato que vence el 1 de enero de 2019.
La oposición acusa a Rousseff de haber cometido un "crimen de responsabilidades" al realizar unas maniobras fiscales irregulares para maquillar las cuentas de 2014 y 2015.
El pueblo brasileño se ha activado en diversas movilizaciones en defensa de la democracia, no solo en apoyo a la actual mandataria, sino al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien también se enfrenta a la posibilidad de un juicio político por supuestos casos de corrupción.