La fiscalía colombiana desarticuló recientemente una banda criminal que habría robado al sistema de salud de ese país suramericano más de 10 millones de dólares. 

Se trata de un grupo vandálico conformado por más de 30 personas, 17 de ellos militares activos que robaron los recursos del Estado con pensiones de invalidez, conceptos médicos falsos e indemnizaciones fraudulentas. 

Entre los involucrados figura el sargento mayor Julio César Zapata Zapata, cuatro tenientes coroneles, dos tenientes,  y el resto de los implicados tienen grado de suboficial.

De acuerdo con la investigación que adelanta la fiscalía colombiana la red criminal usaba los pacientes para reclamar millonarias indemnizaciones de las cuales 30 por ciento quedaba para el beneficiario y 70  por ciento para los delincuentes. 

En otro punto, la investigación revela que para expedir los certificados médicos por discapacidad, la red cobraba 20 millones de pesos (10 mil dólares) y por certificar altas pensiones a los integrantes del Ejército solicitaban 40 millones.

Rechazo total

Tras el escándalo, el Ejército de Colombia emitió un comunicado donde condena cualquier tipo de acción que ponga en riesgo la estabilidad de los habitantes de ese país.

"El Comando del Ejército condena estos hechos y reitera que no tolerará ningún caso de corrupción donde se encuentren vinculado alguno de sus integrantes”, narra la comunicación. 

Asimismo, el texto subraya que “el Ejército tomará medidas anticorrupción y aplicará reformas profundas al sistema de salud, para garantizar el acceso real a la provisión de servicios oportunos y de buena calidad para todos los usuarios de la Sanidad Militar”.

En febrero de 2014 la revista Semana obtuvo cientos de grabaciones donde se habla de sobornos entre militares de alto nivel para la compra de armamento para el Ejército de Colombia.