Los organismos de protección a niños y niñas protestaron contra el Servicio Nacional de Merones (Sename) en Chile para denunciar lo que consideran una sistemática violación de sus derechos humanos. 

El Sename es un centro estatal encargado de darle a los niños y niñas oportunidades que sus familias de origen les negaron o no les han podido dar, lo que los convierte en seres vulnerables. 

El vocero en apoyo a niños del Sename, Miguel Iglesias, instó al Gobierno chileno a pedir perdón y reconocer internacionalmente que vulneró los derechos humanos de los menores. 

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En 2016 una menor de siete años fue asesinada en la sede del Sename, tras ser aplastada y asfixiada por una de sus custodias como método de castigo. 

El presidente de la Asociación Nacional de empleados Fiscales, Jorge Insunza, señaló que las muertes más graves de niños se han registrado en las instituciones colaboradoras del Sename, lo cual lo convierte en un completo "fracaso".

Agregó que a pesar de las acciones que ha tomado Chile sobre las agresiones, no han sido ajustadas. En 2016 el Estado otorgó 245 millones de dólares en pagos estatales.

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Por su parte, la portavoz de la Red Nacional por la Infacia, Cecilia De Setafino, agregó que es necesario una reparación completa en el país, en el ámbito de protección a los menores, para que tengan una vida más feliz y puedan ser integrados socialmente.

Chile desde 2006 ha registrado al menos 1.313 niños muertos en los centros del Sename o en organismos colaboradores privados y según el Instituto de Derechos Humanos casi la mitad de ellos han sufrido maltrato o abusos de todo tipo.