El Sindicato de Profesores de Nigeria convocó a todos los centros de educación primaria y secundaria a cerrar sus puertas por tiempo indefinido, en protesta por el reciente secuestro de más de 200 niñas en el norte del país y los continuos atentados terroristas que sufren los jóvenes y la población civil en general.

Al mismo tiempo, la organización sindical organizará protestas en los 36 estados del territorio nigeriano y en la capital del país, Abuya, para exigir la liberación de las niñas, secuestradas el pasado 14 de abril de una escuela de Chibok, por la organización terrorista Boko Haram.

El titular del Sindicato, Michael Olukoya, señaló que los educadores también exigen una compensación para las familias de sus 173 compañeros de profesión que han sido asesinados en ataques terroristas en los Estados de Borno y Yobe, al noreste del país.

"Estamos decididos a continuar la campaña mientras lloramos la muerte de nuestros colegas, hasta que las niñas sean devueltas vivas y los autores de este crimen atroz sean llevados ante la justicia", expresó Olukoya.

De igual manera, el líder sindical reclamó al Gobierno central y los regionales “una compensación adecuada para aliviar la miseria de las familias de las víctimas”.

Asimismo, el Sindicato exige un seguro de vida, tanto para los estudiantes como para los profesores que trabajan y viven en las zonas más conflictivas del país, principalmente en el norte.

Las niñas fueron secuestradas hace 38 días y, desde entonces, no han cesado los ataques de Boko Haram, que se ha cobrado cerca de 150 vidas en varios atentados perpetrados en el centro y norte del país.

Habitada por unos 170 millones de habitantes integrados en más de 200 grupos tribales, Nigeria, el país más poblado de África, sufre múltiples tensiones por sus diferencias políticas, socioeconómicas, religiosas y territoriales.