Las autoridades sirias informaron que unos 22 civiles sirios murieron este jueves producto de un bombardeo de los aviones pertenecientes a la coalición internacional liderada por Estados Unidos que sobrevolaban la ciudad siria de Raqqa.

Se conoció que 11 de las víctimas, entre ellos cuatro mujeres y tres niños, fallecieron en el barrio sirio de Al-Badu, Raqqa, tras los reiterados bombardeos. Mientras que los otros 11 murieron en la aldea Shibatat, en el norte de Deir Ezzor, donde los ataques afectaron las infraestructuras de las viviendas.

En reiteradas oportunidades, la coalición estadounidense ha causado la muerte de civiles en territorio sirio e iraquí, por sus ataques contra el grupo autodenominado Estado Islámico (Daesh, en árabe). 

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Tal es el caso del pasado 4 de septiembre, cuando la coalición provocó la muerte de 14 civiles en la ciudad siria de Raqqa y otro en la misma ciudad el ocho de agosto, que dejó 29 ciudadanos muertos, de los que 14 eran niños.

Aunque Washington desconoce las pérdidas de civiles en el territorio sirio producto de sus bombardeos, organizaciones internacionales han informado que unos 1.700 civiles han muerto producto de los ataques estadounidenses. Asimismo, han sido acusados de emplear municiones de fósforo blanco en sus sistemáticos bombardeos en Siria, hecho que viola las convenciones internacionales.