El club brasileño Chapecoense, víctima de la tragedia aérea que dejó sin vida a 71 personas en 2016, arribó la madrugada de este lunes a Maracaibo, Venezuela, donde debutará en la Copa Libertadores este martes ante el Zulia FC.

Con un plantel reconstruido en base a 22 fichajes —19 jugadores y el entrenador Caio Junior murieron en el accidente del avión—, el Chapecoense regresa a la escena internacional entre grandes expectativas.

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"Tenemos muchas ambiciones. Vamos a tratar de llegar lo más lejos posible", declaró a la prensa una de las caras nuevas del conjunto brasileño, el delantero Tulio De Melo, de 34 años.

El nuevo técnico Vágner Mancini tendrá la oportunidad de mostrar a nivel internacional, el juego ofensivo que ha planteado hasta ahora, con cuatro hombres de ataque, entre ellos el habilidoso Niltinho como falso 9.

Por su parte, el Zulia también jugará por primera vez en Libertadores tras ganar el pase por su sobresaliente 2016, en el que se quedó a las puertas de bordar su primera estrella en el fútbol venezolano.

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Pensando en el torneo continental el Zulia se reforzó con jugadores como el marfileño Hervé Kambou y los venezolanos Yohandry Orozco y Juan Arango, este último considerado el mejor futbolista de todos los tiempos en su país.

"(Chapecoense) será un rival complicado, difícil de estudiar, con muchos jugadores nuevos", dijo Arango sobre su rival en un comunicado de prensa.