El exembajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Roy Chaderton, consideró que ese organismo necesita un respirador artificial, además de recuperar algo de dignidad, por lo que le sugirió al secretario general de esta, Luis Almagro, renunciar.

“Después del papelón que hizo ayer (miércoles) y los regaños que recibió de los embajadores, debería presentar su renuncia, aunque lo entiendo, son 20 mil dólares mensuales, más HCM (seguro) y la posibilidad de concluir su mandato con una carta de residencia en los EE.UU.”, comentó.

>> Unasur insta al diálogo en Venezuela ¿y la OEA?

“Sería muy digno que renunciara, ya perdió toda autoridad, sobre todo cuando pretendió igualarse a un jefe de Estado como Nicolás Maduro”, apuntó el diplomático.

Chardeton ofreció declaraciones exclusivas a teleSUR desde La Habana, Cuba, donde asiste a la VII cumbre de la Asociación de Estados del Caribe (AEC), en la que se tocan temas para enfrentar los retos del desarrollo sostenible, el cambio climático y la paz regional.

“La OEA no ha sido capaz y dudo que sea capaz de tener éxito en gestiones de paz.”

Previo a estas reuniones, el diplomático calificó a Almagro como un “menordomo” de los Estados Unidos, que “enloquecido trató de arrastrar a la OEA a una decisión antidiplomática e intervencionista contra los principios consagrados en la Carta Democrática y otros documentos, pero obtuvo un fracaso estrepitoso”.

Asimismo, se refirió a la medida tomada por el secretario general de esa organización, quien el pasado martes solicitó la activación del procedimiento para abrir la Carta Democrática contra Venezuela, un paso sin precedentes e irregular que abre un nuevo capítulo de arremetida contra la nación suramericana.

>>Almagro solicita activación de Carta Democrática de la OEA contra Venezuela

Esta decisión fue sumamente criticada en la sesión extraordinaria que realizó la OEA el pasado miércoles, en la que 34 países miembros acordaron respaldar el diálogo entre el Gobierno y la oposición venezolana. 

“Lo de ayer (el respaldo al diálogo) significó un golpe muy rudo (para la derecha), sin embargo, se me hace difícil que algunos países sobre todo los más blandos u obsequiosos, puedan terminar seducidos por este impulso alocado de Almagro”, apuntó Chaderton.