El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció que cinco mil 147 policías que actualmente se encuentran prestando servicios en instituciones públicas, serán incorporados y redistribuidos respectivamente en labores de seguridad ciudadana, a fin de reducir la criminalidad en los nueve departamentos del país.

Durante una conferencia de prensa en el Palacio de Gobierno, Morales manifestó que “no es posible que un Ministro tenga seguridad y no el pueblo boliviano, es mejor que tenga seguridad el pueblo boliviano”.

En este sentido, detalló que la medida asumida en el gabinete de ministros, implica la reducción de agentes que en la actualidad se encargan de garantizar la seguridad de los altos funcionarios del Gobierno.

Por su parte, los oficiales y policías de la Escuela Básica, los del último año de la Academia Nacional de Policías, los que cursan estudios de post grado y los que son parte de centros de formación técnica, se sumarán también a las tareas de seguridad ciudadana y se les respetará sus horas de estudio.

Asimismo, unos dos mil policías de los ocho mil 600 que se desempeñan en labores administrativas, se unirán al plan que permitirá tener mayor presencia policial en las calles, especialmente en las regiones donde existen mayores índices de delincuencia.

Según datos de la Policía Nacional, en Bolivia se tiene en promedio 36 mil uniformados activos, entre oficiales superiores, oficiales subalternos, suboficiales, clases y policías, que están a cargo de los más de 10 millones de habitantes que tiene el país.

Evo Morales pidió al comandante de la Policía, Luis Cerruto, que realice una buena distribución entre todos los departamentos del país, para así atender la demanda de la población.

El líder boliviano adelantó que las Fuerzas Armadas también tendrán una tarea importante para la seguridad y defensa en apego a la Carta Magna, la cual será anunciada próximamente.

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