El primer teniente del Ayuntamiento de Barcelona, Joaquim Forn, dio por terminado este domingo el diálogo con los manifestantes de Can Vies, en Sants, y ha señalado en unos 200 mil euros los daños ocasionados en los disturbios de esta semana en Barcelona.

Forn, también presidente de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), entidad propietaria del edificio que instó el proceso judicial de desalojo de Can Vies, indicó en rueda de prensa a medios locales, que durante los incidentes de la pasada madrugrada en el barrio de Sants, Barcelona, se quemaron 38 contenedores, doce vehículos resultaron calcinados total o parcialmente y una estación del Bicing (servicio de alquiler de bicicletas públicas en la ciudad de Barcelona) quedó afectada.

"Si hay alguien en Can Vies que quiere dialogar, que salga y de la cara, que de un paso de verdad, porque el tiempo se agota", expresó.

Además, cuantificó los daños ocasionados en unos 200 mil euros, durante los disturbios que comenzaron el pasado lunes.

Indicó que el Ayuntamiento que dirige tiene algunos meses dialogando bajo difíciles condiciones e hizo referencia a una supuesta persecusión que ha sido sometido por parte del concejal del distrito de Sants, Jordi Martí.

Expresó su deseo de continuar el diálogo a pesar de que una sentencia del Tribunal Supremo daba la razón al TMB sobre la propiedad del inmueble, para continuar las conversaciones con los representantes de los okupas.

Sin embargo, expresó su rechazo a los actos violentos y manifestó su apoyo a los organismos institucionales que trabajan para contrarrestarla.

"No nos someteremos a la violencia", enfatizó, y mostró "todo el apoyo" al trabajo de los Mossos d'Esquadra, la Guardia Urbana y los servicios municipales de limpieza.

Can Vies, tuvo este sábado la cuarta noche de protestas, donde se detuvieron a 21 personas, informaron las autoridades.

A los detenidos se les imputaron delitos de daños, desórdenes públicos y atentado a agentes de la autoridad. Las jornadas de protestas han arrojado un saldo total de 38 personas detenidas.

El edificio de Can Vies, fue ocupado el 10 de mayo de 1997 por parte de jóvenes del barrio de Sants de Barcelona en respuesta a la falta de espacios donde poder realizar actividades tanto de carácter social y político. Desde entonces, se mantiene un conflicto entre los ocupantes del eficio y la alcaldía local.