Atlético de Madrid tiñó de rojiblanco a la ciudad de Londres (Inglaterra) luego de su victoria a domicilio contra Chelsea por marcador de 1-3; que les permite clasificar a la ronda final de Liga de Campeones para enfrentar al Real Madrid en la ciudad de Lisboa (Portugal).

El equipo local salió con un planteamiento aparentemente defensivo que incluyó la alineación de seis jugadores con corte defensiva; donde Azpilicueta aparecía en segunda línea para detener los ataques por las bandas.

Las primera acción de peligro llegó al minuto 4', cuando Koke envió un remate al poste luego de recibir un mal rechace después de un tiro de esquina. El equipo de Mourinho se recuperó del susto y comenzó a ganar espacio en la media cancha y generar ocasiones de peligro.

David Luiz tuvo la primera de los londinense con una chilena que se marchó cerca. Minutos después un centro de Azpilicueta fue rematado por Fernando Torres y desviado por Mario Suárez para la ventaja al equipo blue. En consonancia con su pasado colchonero, el atacante español pidió perdón a los aficionados que lo vieron crecer como futbolista.

Adrián, una de las apuestas sorpresivas de Simeone, logró empatar las acciones cuando faltaban 120 segundos para culminar la primera mitad; lo que fue un golpe fatal para el Chelsea, cuya estrategia se vio disminuida con el transcurso del partido.

El inicio del segundo tiempo trajo al Atlético de Madrid con la intención dispuesto a escribir su propia historia; gracias a Arda Turán y Tiago, sin embargo, su afán ofensivo casi le cuesta verse abajo, pero Courtois estuvo atento a un cabezazo de Terry que destino destino de red.

A los 58' el delantero Samuel Eto'o cometió un claro penal sobre Diego Costa; y el hispano-brasileño no perdonó desde los doce pasos y dio la ventaja al Atlético, una que no perdería; sino que vería ampliada en la fracción 71' cuando Turán luego de una combinación con Tiago y Juanfran.

De esta forma, Atlético de Madrid jugará su primer encuentro final en Liga de Campeones en los últimos 40 años; su rival citadino, el Real Madrid de Carlo Ancelotti; que despachó magistralmente al Bayern Munich de Josep Guardiola, será el último obstáculo que buscará superar en la mejor temporada de su historia.