Un carro bomba estalló este jueves al frente de la sede del Banco de Grecia, en el centro de Atenas (capital) sin causar víctimas, pero sí importantes daños materiales en los edificios cercanos.

La explosión se registró horas antes de la primera emisión de deuda pública griega desde el inicio de la crisis económica en el año de 2007, y cuando falta un día para que la canciller alemana, Angela Merkell, llegue a la capital griega en visita oficial.

Según una fuente policial, el hecho se produjo a las 02H55 GMT en un vehículo aparcado en la acera situada frente a la sede del banco. Muy cerca del lugar se encuentra también una oficina de la llamada Troika de acreedores internacionales (Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional).

La Policía está investigando las imágenes de las cámaras de seguridad que registraron el momento en que un desconocido aparcó el automóvil, robado el pasado 6 de abril, y que estaba cargado con 75 kilos de explosivos.

Testigos citados por los medios aseguraron haber visto una o dos personas aparcar un vehículo ante el Banco de Grecia y luego marcharse en una moto.

"El aparente objetivo de los autores es cambiar el orden del día. No permitiremos que los terroristas logren su objetivo", dijo el portavoz del Gobierno, Simos Kedikoglu, en una primera reacción en el programa matutino de la televisión privada Skai.

Los atentados en Grecia, en general sin víctimas, suelen apuntar a blancos institucionales, y son obra habitualmente del movimiento anarquista.

El último incidente mayor tuvo lugar el pasado 30 de diciembre, cuando cuatro personas abrieron fuego y dispararon unos 60 tiros contra la residencia del embajador alemán en Atenas, sin causar víctimas.

Una organización armada denominada "Grupo de Luchadores Populares" se atribuyó en febrero de este año este ataque, que justificó con la necesidad de luchar contra "la maquinaria capitalista alemana".