Un hangar "gigantesco" construido inicialmente para fabricar aviones dirigibles de la época soviética en el corazón de la Alemania del Este fue convertido en un paraíso tropical.

El complejo tiene: playas de 200 metros de extensión con blancas arenas, 850 tumbonas, 500 plantas seleccionadas por botánicos y una temperatura que oscila entre 25 y 28 grados.

El interior cuenta con un área de aproximadamente ocho estadios de fútbol y se trata de la sala mas grande del mundo sin columnas de apoyo interior.

Quienes lo han visitado cuentan que es siempre cálido, incluso en invierno. “Al parque acuático se le une un pequeño bosque tropical, con árboles exóticos y los sonidos propios de un bosque real que son distribuidos por altavoces estrategicamente colocados en forma oculta”, cuenta una turista.

Las instalaciones están en funcionamiento todo el año, las 24 horas, incluyendo lugares para acampar en un ambiente silvestre y controlado al mismo tiempo.