Investigadores del Instituto Max Planck de Física del Plasma en Alemania esperan la aprobación regulatoria para poner en marcha el reactor estelar W7-X, el dispositivo de fusión nuclear más grande del mundo.

Se trata de una máquina construida durante el año 2014 por el Instituto alemán, con el objetivo de tener una fuente de energía limpia e inagotable, en forma de la fusión nuclear. Es el primer ejemplo de un nuevo tipo de reactor estelar diseñado con el uso de un superordenador, con el cual se espera un gran cambio en el curso del área de la energía de fusión.

Después de más de un año de pruebas, finalmente los ingenieros del la institución podrían poner en funcionamiento esta máquina que cuesta mil 100 millones de dólares, antes de que finalice el 2015.

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El W7-X es más seguro y eficaz en contener plasma durante largos períodos, lo que podría ayudar a los científicos a proporcionar una fuente inagotable de energía.

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Especialistas aseguran que a pesar de que el tokamak es ideal para contener plasma, presenta algunos riesgos de seguridad, por ejemplo, cuando la corriente falle o haya una interrupción magnética, lo que podría desencadenar fuerzas magnéticas suficientemente poderosas para dañar el reactor.

En este sentido, los científicos del Instituto Max Planck afirman que su creación, el W7-X representa una opción más práctica que puede superar los problemas de seguridad de tokamak.

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