El legado del huracán Katrina después de 11 años
En 2005, los intensos vientos de Katrina (que llegaron a alcanzar los 180 kilómetros por hora) provocaron destrucción masiva y la muerte de al menos 1833 personas. Hasta ahora es calificado como uno de los huracanes más letales que ha golpeado a Estados Unidos.
El día de la catástrofe
El 29 de agosto de 2005 la ciudad de Nueva Orleans se vio asolada por el huracán Katrina. Dicha catástrofe dejó un saldo de 1500 muertos y causó el desplazamiento de 90% de los habitantes, así como daños económicos de 150 mil millones de dólares, lo que la convierte en el desastre natural más costoso en la historia de los Estados Unidos. El sistema federal de diques de Nueva Orleans se rompió cuando el huracán Katrina golpeó la ciudad, lo que causó inundaciones de hasta seis metros de profundidad que cubrieron cerca de 70% del territorio de la ciudad. Vea aquí→ Se forma tormenta tropical Danny enelAtlánticoEn los días que siguieron a la tormenta, Nueva Orleans se convirtió en un ejemplo internacional de mala gestión gubernamental ante desastres,con miles de personas forzados a buscar refugio en techos o dentro del ya abarrotado Superdomo de Nueva Orleans.“Emergencias de salud pública como el huracán Katrina muestran que necesitamos preparar, coordinar y mejorar las estrategias de respuesta,”explicó Eden Wells, profesor asociado de epidemiología clínica de la Universidad de Michigan.
Los más pobres, los más afectados
Los afroamericanos y los barrios pobres situados en zonas de la ciudad propensas a las inundaciones fueron los que se vieron mayormente afectados.El ex secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano de los Estados Unidos (HUD, por sus siglas en inglés), Shaun Donovan, ahondó recientemente en cómo el huracán Katrina afectó de forma desproporcionada a la población afroamericana y de bajos recursos que vivía en zonas propensas a las inundaciones.“Esos barrios que,de forma inherente, suelen ser los económicamente menos deseables son los que se llevaron la peor parte,” declaró Donovan, el mes pasado.Las personas que residían en las áreas más pudientes ubicadas fuera de las zonas propensas a inundación eran menos vulnerables y se encontraban relativamente protegidas.Nueva Orleans, que tiene dos tercios de población afroamericana, se ha visto profundamente afectada por las divisiones históricas de raza y clase provocadas por el legado de esclavitud y segregación institucional.Un informe reciente publicado por Data Center reveló que el ingreso familiar promedio de los afroamericanos en Nueva Orleans era 54% inferior a la de los blancos de la zona.Katrina arrasó con Nueva Orleans, y sus consecuencias todavía siguen presentes, especialmente para los residentes afroamericanos.
La crisis de Nueva Orleans
Una encuesta reciente llevada a cabo por NPR y Kaiser Family Foundation mostró que los afroamericanos eran mucho menos optimistas con respecto al proceso de recuperación.
Mientras que siete de cada 10 personas blancas consideran que la ciudad se ha recuperado casi completamente, tan solo 44 por ciento de los afroamericanos piensa lo mismo, ya que la mayoría de ellos (54 por ciento de la población afroamericana) considera que la ciudad no se ha recuperado totalmente.
Según un informe reciente de Data Center, los índices de pobreza en Nueva Orleans han alcanzado los niveles que había antes de Katrina, con un índice de 27 por ciento aproximadamente.
“Lo que vivieron los refugiados del huracán Katrina resalta las dificultades a las que se enfrentan aquellos en situación de pobreza extrema, incluyendo los pocos servicios disponibles, dificultad para ejercer sus derechos y todos los problemas particulares que surgen cuando toda una comunidad está empobrecida,” declaró en un comunicado de prensa de la Universidad de Michigan, Laura Lein, profesora y decana de la Escuela de Trabajo Social.
Avanzando reconstrucción
A 11 años del huracán Katrina, Nueva Orleans continúa reconstruyendo su infraestructura y economía.
Lo más significativo es que después de Katrina, el gobierno ha gastado 14 mil millones de dólares en reparación de infraestructura de protección contra tormentas.
A pesar del progreso económico y el avance en reformas, el futuro progreso económico y social debería apuntar a segmentos más amplios de la población.