Juan Montalvo fue un progresista para su tiempo, escritor, nacionalista, surgió como un verdadero referente de cómo hacer una oposición ingeniosa, argumentada e ideológica, y en algunos casos lapidaria contra la iglesia católica y expresidentes del Ecuador.

Montalvo fue un joven ambateño, tierra donde nacieron los 3 famosos juanes. Montalvo pasó por mucho tiempo autoexiliado en Europa, países como; Madrid, París, fueron su lugar de residencia, donde se formó y aprendió las bases del liberalismo.

Desde su pluma fue activamente crítico contra el autoritarismo, implementando técnicas actuales del periodismo para denunciar el abuso, esto fue plasmado en sus periódicos; «El Cosmopolita» y  «Catilinarias», en la cual reflejaba su más acérrimo pensamiento.  

Aquí fueron extenuados hasta más no poder los ex mandatarios de la República; Gabriel García Moreno, e Ignacio de Veintimilla, quién día a día recibían señalamientos como ‘tiranos’, ‘dictadores’, ‘asesinos’, una férrea lucha que mantuvo a Montalvo alejado de todo extracto social.

Considero histórico el día cuando Montalvo y García Moreno se encontraron por las viejas calles de Quito, uno iba y el otro regresaba, en un momento dado chocan sus miradas y García Moreno dijo; «Yo no doy paso a perros», en la cual Montalvo respondió con altura; «Yo sí, pase».

Fue tanta su azaña contra el régimen de García Moreno, que cuando este ganó su 3 mandato consecutivo para elecciones presidenciales, Montalvo escribió un folleto llamado; «La Dictadura Perpetua», esto hizo que enardeciera a la oposición, un día después García Moreno fue asesinado abruptamente, al saberlo Montalvo mencionó; «Mi pluma le mató».

Montalvo fue un regenerador de cómo hacer un nuevo periodismo inmerso en la política, visionario para su época, consiguió difundir un mensaje de igualdad y derechos, para muchos sus pensamientos ideológicos no eran los más acertados, y para otros representaban la voz de una libertad sin opresión.

Referente en muchos aspectos, instauró una serie de doctrinas que fueron fundamentadas y establecidas en una cadena de panfletos, donde denunciaba activamente la agresión, la dictadura, en una sociedad donde no había libertades de pensamientos, y donde él puso las bases del fundamentalismo y liberalismo ideológico. 

Montalvo fue un gran ejecutor de enseñanzas que hasta nuestros días están presentes, sus pensamientos siempre quedarán plasmado en la mente de historiadores y eruditos que lo han estudiado y lo siguen estudiando. Pasó del aperturismo ideológico, a su más férrea guerra de libertad de pensamientos, su pluma y su escritura fueron como balas que llegaron donde tenían que llegar. Sus obras están plasmadas en la posterioridad de la historia ecuatoriana, dejando un legado de liberalismo y lucha por la dignidad.