Con distintos matices, La Historia se repite.

Podemos, si somos exigentes, repasarla desde la época de la conquista ó partir de 1930 con el fenómeno de los golpes de estado; donde las oligarquías ya consolidadas por políticas anteriores, temerosas  del ascenso de las luchas sociales y populares, dan por tierra con las democracias incipientes, por miedo a perder sus privilegios y su capital mal habido, a costa de la explotación de la mano de obra de la clase trabajadora y de la apropiación ilegal de tierras pertenecientes al Estado Argentino. Las leyes, elaboradas por legisladores que respondían mayoritariamente  a esa clase social, avalaban esos actos en perjuicio del pueblo en general mientras iban consolidando el poder de la burguesía .

Un solo fenómeno político vino a molestar el normal desarrollo del atraso y la expoliación, y se da a partir de 1945 con la aparición en la arena política y sindical del peronismo, y luego transmitida y tomada por la mayoría del pueblo.

Estamos hablando de la política populista del Gral. Perón que en cierta forma revolucionaría lo habido hasta ese año y daría un gran impulso a las conquistas sociales y económicas de la Nación.

Fue una década de muchas riquezas y avances que permitieron un notable bienestar de la clase trabajadora; pero no su emancipación. No se blindaron las conquistas, y prueba de ello fue el golpe del 55, como de costumbre con la complicidad del imperio a través de la Embajada de los EEUU.

Omito contar los detalles de la historia de esa década porque sería subestimar el conocimiento  de los lectores.

Luego vendría la alternancia de gobiernos civiles y dictaduras cívico-militares de todos los tenores y gustos que conduciría a la Nación a un estado cada vez mayor de desintegración y dependencia, pobreza creciente, mayor deuda externa y desindustrialización; en especial una que se da el 24 de Marzo de 1976 en connivencia con sectores civiles del poder y de la Iglesia y que generan el genocidio de 30.000 personas, la mayoría militantes y luchadores por una Patria mejor. Los horrores son de público y mundial conocimiento, y sus secuelas aún perduran hasta nuestros días.

Otro fenómeno procedente del peronismo, vendría (por así decirlo) a rescatar de las ruinas y el empobrecimiento,  al sufrido pueblo, a los de abajo, los Movimientos Sociales, las Pymes y numerosos sectores sociales perjudicados; y hacer valer el Patrimonio Nacional, las instituciones; darle sentido a los valores de la nacionalidad, el patrimonio y  la integración al resto de Latinoamérica.

Me refiero a la gestión de Néstor Kirchner y luego a la de Cristina.

Algo falló, o faltó, o no se hizo en los 12 años de gestión ( las conclusiones a cargo del lector ), para que en una elección con una diferencia de menos del 2%; una DERECHA NEOLIBERAL  que ya tenía antecedentes de operatividad con casi un mismo modelo en Latinoamérica, echara por tierra todo lo conquistado desarmando a la “oposición” hasta en las sesiones del congreso con complicidad de muchos de los que antes participaron en esos 12 años de gestión progresista.

Las mentira, la traición de los propios (ó que se consideraron como propios) y el arma más importante : LOS MEDIOS; lograron ganar la batalla ideológica que desde el progresismo no se dió; y colocó otra vez a nuestra historia en el movimiento pendular alternante y oscilante para poder calificar el hecho como la moderna y más cruel neocolonización luego de 500 años.

Pienso que, tal vez como dice la marcha peronista, que  no se trate esta vez de “combatir al capital”,  sino al capitalismo que son dos cosas diferentes;  de concientizar antes que sea muy tarde, que vienen por todo, por las reservas del “Patio Trasero”  desde México a la Antártida, pero que su objetivo más apetecible e inmediato es invadir Venezuela por su petróleo y sus riquezas naturales y minerales Si no lo hicieron hasta ahora es porque saben cómo podrían entrar; pero con  ese pueblo Bolivariano y su Ejército no saben cómo van a hacer para salir.