El último vídeo subido por el Estado Islámico amenaza con atacar a 60 países, entre ellos a México, no cabe duda que este grupo manda una clara advertencia, un peligro latente que se lo debe de tomar enserio.

Haciendo un poco de zapping me percaté que algunos mexicanos hacen caso omiso, tomándoselo a mofa la advertencia yihadista, preocupado estaría yo si supiera que mi país está amenazado, deberían de tomárselo con seriedad, estamos hablando de uno de los grupos más sanguinarios de la historia de la humanidad.

Tan fácil sería para ellos ir con kamikazes que exploten bombas en entradas de centros comerciales, escuelas, colegios o instituciones, solo basta que uno tenga la misma ideología suicida para estar seriamente preocupados de lo que pueda pasar. 

No juguemos con esto.

Pongamos a pensar un minuto que sentirían todos los familiares que han sido víctimas del terrorismo, que doloroso sería para ellos ver vídeos de bufonadas de decapitaciones, como si se tratase de ir a comprar pan a la panadería, o de coger el bus en una parada.

La mayoría de los cibernautas se lo toman a cháchara, con memes e imágenes que ridiculizan las amenazas del grupo terrorista, como si subir vídeos jocosos nos llevaría a ganar el Premio Nobel de la Paz para saber quien es el más chévere que se lleva más “like” en redes sociales.

Muchos mexicanos se sienten confiados y piensan que esto jamás llegaría a pasar en su país, pero aquí me acuerdo la frase del profesor Marcelo Bielsa; “hay que estar preparado para todo, y hay que evitar lo que no nos conviene”.

Nunca se sabe lo que pueda pasar y siempre se debe estar presto ante cualquier eventualidad. Ojalá que estos actos de apercibimiento no sucedan en nuestra América Latina, que como países latinoamericanos estemos más unidos que nunca, para que el día de mañana nuestros hijos, nietos, bisnietos, tataranietos y las futuras generaciones puedan caminar libres, sin temores, sin miedo que les pueda pasar algo, converjamos en una hermandad para materializar el mundo de paz que todos queremos, en unión con todas las naciones que se encuentran en conflicto del planeta tierra.