Las tragedias aéreas han ensombrecido este 2014, reavivando las dudas sepultadas hace un siglo sobre la seguridad de viajar por aire. Más de 700 personas han muerto en los últimos cuatro meses y 537 de ellas en dos siniestros de la compañía Malaysia Airlines.

Enigmáticos sucesos en el aire comenzaron a partir de la desaparición del vuelo MH370 de Malaysia Airlines, operado por un avión boeing 777, que dejó 239 personas fallecidas. Este caso hizo vibrar a la opinión pública porque el avión simplemente desapareció.

Las grandes potencias del mundo se sumaron a la búsqueda, pero ninguna ha dado resultados concretos. El primer ministro malasio, Najib Razak, aseguró que el avión había caído al Océano Índico, sin embargo, aún no aparecen los restos del avión ni de los cuerpos.

"Si el 28 de junio no se hubieran reanudado los combates en el este de Ucrania, esta tragedia, seguramente, no habría sucedido", 

Vladimir Putin​ sobre siniestro en Donetsk.

El accidente con mayor número de víctimas se registró el pasado 17 de julio, fecha en que otro boeing 777 de Malaysia Airlines fue presuntamente derribado en la República Popular de Donetsk. Cubría la ruta entre Ámsterdam y Kuala Lumpur y a raíz del siniestro murieron 298 personas, de los cuales 192 eran holandeses.

Taiwán también ha tenido parte en este julio negro. El pasado miércoles se estrelló un avión de la aerolínea TransAsia al intentar aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Magong, dejando un saldo de 48 muertos y 10 heridos.

El último de los sucesos aéreos se registró este jueves, al estrellarse un avión de la aerolínea argelina Air Algerie, mientras cubría el trayecto entre Ouagadougou, la capital de Burkina Faso, y Argel, capital de Argelia. Como dato curioso, medios han apuntado que la nave modelo AH5017, que operó para la compañía aérea española SwiftAir, fue la misma que utilizó el equipo de fútbol Real Madrid entre 2007 y 2009.