Sin su nacimiento la verdad seguiría secuestrada, retorcida y desaparecida. Sería la misma “verdad” que nos ha llevado hasta donde estamos; desnutridos de justicia e desigualdad. Estaríamos a expensas de una sola voz y del ojo extraño. De un monopolio de una mono-verdad.

Gracias por darnos la verdad del golpe de Estado en Honduras. Este golpe estaría lavado de sangre e imperialismo sin la versión y balance que produjo la cobertura en tiempo real de Telesur. Sin acompañar la resistencia social y los intentos de retorno del presidente Zelaya la historia seria como un golpe más del viejo estilo Latinoamericano.

Gracias por enseñarnos a mirarnos desde nosotros mismos. Gracias por llevar nuestra mirada a las guerras por petróleo. Gracias por contribuir con ese otro mundo más diverso e inclusivo que buscamos. Por darle la vuelta al imperialismo mediático.

Ahora podemos mirarnos y empezar a romper los cercos y ver el otrora “patio” como el paraíso que siempre fuimos, colmado de bellezas naturales, lleno de nuestros propios sabores a chocolate,  caña de azúcar, canela, café, papa, coco, aguacate… y de colores pamperos, andinos o isleños.

Estamos de fiesta también los movimientos sociales latinoamericanos porque después de 10 años ya tenemos voz y ojos… Ahora nos falta aprender a caminar, aligerar el paso para un mundo socialmente más justo y ecológicamente más sano.

Para ello estamos luchando contra la realidad de desigualdades e injusticias ocultas por el cerco mediático trasnacional. Contra la denuncia de la  apropiación corporativa de nuestros campos y la mercantilización de la naturaleza  y sus nuevas  formas de dominación y explotación.

Nunca más una américa latina sin ojos y voz propios. Nunca más una verdad maquillada y teledirigida. No más un patio trasero de nadie. Nunca más el destino manifiesto. Nunca más medidos con escalas y valores ajenos.

Se abrió irreversible un panóptico propio en nuestra historia. Escribir esa nuestra historia, no ser objetos de otros sino protagonistas. Desenfocando para siempre el lente con filtro sepia, folclórico y colonialista con que nos solía ver el mundo, será una guía para saber lo que no queremos.

Con teleSUR sabemos que nuestras luchas, sueños y esperanzas sí serán trasmitidos. Feliz décimo aniversario, teleSUR. Los movimientos sociales y los medios emancipatorios caminamos juntos haciendo historia.
 

*Mauricio Álvarez es costarricense, geógrafo, profesor universitario y presidente de la Federación Ecologista de Costa Rica. Integrante activo de los movimientos sociales en ese país.