Siria  e Irán, a través de sus ministros de Relaciones Exteriores, Faisal Al-Mekdad y Hussein Amir Abdollahian, respectivamente, acordaron este domingo continuar adelante con sus consultas periódicas para frenar la injerencia de los Estados Unidos (EE.UU.) en los asuntos internos de ambos países.

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Al-Mekdad refirió que la Casa Blanca “busca crear una crisis en los países independientes, incluida la República Islámica de Irán”.

Afirmó que EE.UU. y Occidente quieren un Irán arruinado y dependiente, no un Irán próspero, avanzado e independiente, e insistió que todos vieron lo que EE.UU. y sus aliados han hecho en Siria, Irak y Afganistán.

Por su parte, Hussein Amir Abdollahian declaró que “las presiones políticas y propagandísticas no perturbarán la determinación de la nación y el Gobierno de Irán de seguir el camino del honor, la independencia y el progreso, y apoyar la estabilidad y la seguridad de los países de la región”.

Además, el jefe diplomático iraní puntualizó que la República Islámica continuará oponiéndose a la las agresiones del régimen de ocupación de Israel y comunicó que “la nación iraní frustrará las conspiraciones de los enemigos con vigilancia”.

Entre tanto, plataformas locales comunicaron que el ministro Abdullahian precisó que las acusaciones contra su país por supuestamente enviar drones para usarlos en la operación militar especial de Rusia en Ucrania son infundadas y difamatorias.

Ambos cancilleres insistieron que es importante seguir posicionando dichas posturas en los foros internacionales para fortalecer y desarrollar estrategias que impulsen las relaciones bilaterales con un sentido emancipador y antimperialista.