Elementos del grupo terrorista Frente Al-Nusra desplegados en la zona de distensión de la provincia de Idlib (noroccidente) lanzaron este viernes un ataque con misiles contra zonas residenciales de la región costera de Latakia.

LEA TAMBIÉN:

Rusia, Turquía e Irán se comprometen a garantizar seguridad en Siria

La ofensiva, que se produjo pocas horas después de la entrada en vigencia de un nuevo cese al fuego en Idlib, dejó un efectivo del Ejército Árabe Sirio y al menos tres civiles muertos, además de daños materiales en el poblado de Bashllama.

El ministerio de Defensa sirio había anunciado un alto al fuego unilateral a partir de la medianoche del pasado jueves, con la intención de retomar la aplicación de los acuerdos de Sochi y como un gesto conciliador en el marco de las conversaciones de paz que se desarrollan en Kazajistán.

Sectores de la oposición armada, en conjunto con los Gobiernos de Siria, Rusia, Turquía e Irán acordaron en la ciudad rusa de Sochi en 2018, el retiro de las bandas extremistas a unos 20 kilómetros de la línea de separación en la zona de desescalada de Idlib. Según lo pactado, los radicales además debían entregar a las autoridades armas medianas y pesadas, lo que se cumplió de forma parcial.

Desde entonces, la franja desmilitarizada ha sido violada sucesivamente por los grupos terroristas, motivando contraofensivas de retaliación de las fuerzas gubernamentales.

En la provincia de Idlib, los yihadistas conservan su último bastión territorial en el país árabe. Autoridades sirias han calculado la presencia allí de alrededor de 20.000 combatientes radicales y unos 6.000 mercenarios extranjeros que se han ido concentrando tras ser expulsados por el Ejército de otras regiones.