Rusia y Turquía acordaron estudiar la creación de un grupo de trabajo para buscar una solución política al conflicto armado en Libia, que enfrenta al Ejército Nacional Libio (ENL), brazo armado del Parlamento, y al Gobierno de Acuerdo Nacional (GAN).

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Según informó este miércoles el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso en un comunicado, ambos países han decidido "estudiar la creación de un grupo de trabajo conjunto sobre Libia y celebrar la próxima ronda de conversaciones en Moscú en un futuro cercano".

En este sentido, ratificaron su intención de "mantener los esfuerzos conjuntos, incluida la influencia sobre las partes libias, con el objetivo de crear las condiciones para un alto el fuego duradero" y para "avanzar hacia el diálogo político en Libia".

"El conflicto libio no tiene una solución militar, solo se puede resolver mediante un proceso político liderado y desarrollado por los propios libios con la asistencia de la Organización de Naciones Unidas (ONU)", han sostenido.

Además, Moscú y Ankara han instado a las partes a "adoptar medidas para garantizar un acceso humanitario seguro y proporcionar asistencia urgente a todas las personas que lo necesiten".

Al mismo tiempo, han reiterado su "firme compromiso con la soberanía, la independencia y la integridad territorial de Libia" y "la necesidad de combatir a los terroristas y a los grupos terroristas reconocidos como tal por el Consejo de Seguridad de la ONU".

La guerra en Libia se ha recrudecido desde abril de 2019, encontrándose actualmente en peligro de una nueva escalada, dada la concentración de tropas que desde hace días se produce en los alrededores de la ciudad de Sirte.