Rusia destruyó en las últimas horas un gran arsenal con pertrechos militares en la provincia ucraniana de Rovno, localidad de Órzhiv, con armas de alta precisión basadas en el mar, informó este miércoles el portavoz del Ministerio de Defensa ruso, Ígor Konashénkov.

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El funcionario, como parte de la presentación del informe sobre el desarrollo de la operación militar rusa en Ucrania en la última jornada, detalló que se neutralizaron ocho tanques, cinco transportes blindados, siete obuses y tres fortines.

“Los aviones tácticos, así como las fuerzas de misiles, destruyeron 97 instalaciones militares de Ucrania en un día. Entre ellas, dos (...) sistemas de misiles tácticos Tochka-U en una zona industrial en las afueras y al norte de Kiev”, dijo Konashénkov.

También la defensa aérea interceptó un caza Su-23 y 16 drones ucranianos. Como parte del desarrollo operativo militar, Rusia arrasó con ocho complejos antiaéreos de su contraparte, incluyendo seis Buk, un S-300 y un sistema Osa.

Las tropas del país euroasiático están combatiendo por el pueblo Novomijáilovka, en el territorio reclamado por la autodenominada República Popular de Donetsk (RPD). La milicia de esta región separatista  consiguió controlar la localidad de Verjnetorétskoe y la estación de ferrocarril Novobajnútovka.

Desde el inicio del despliegue militar, Moscú detalla que ha inhabilitado 246 drones, 184 aviones y helicópteros, 189 complejos de defensa aérea, 1.558 tanques y otros vehículos blindados, 156 sistemas de lanzacohetes múltiples, 624 obuses y morteros, además de 1.354 vehículos militares especiales.

El pasado 24 de febrero, el presidente ruso Vladímir Putin anunció el inicio de una operación militar especial en la región del Donbas, luego de que el mandatario reconociera como Estados a las autoproclamadas repúblicas de Donetsk y de Lugansk.

La región separatista firmó un acuerdo de cooperación y ayuda mutua con la Federación rusa, en virtud del cual los líderes de las naciones solicitaron ayuda a Moscú para enfrentar al Ejército ucraniano. Tras el inicio de la contienda militar, Moscú asegura que su objetivo es desnazificar y desmilitarizar Ucrania, mientras el Ministerio de Defensa ruso reitera que solo tienen entre sus objetivos las instalaciones militares y no las civiles.

Ucrania rompió relaciones diplomáticas con Rusia, impuso ley marcial en todo su territorio y un toque de queda en Kiev y otras ciudades, decretó movilización general e instó a la comunidad internacional a aplicar todas las sanciones posibles contra el mandatario ruso.