El ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, informó este viernes durante una entrevista que Moscú tiene pruebas de sobra de que el supuesto ataque químico en Duma fue un montaje de Londres. 

"Si estas consciente que hay armas químicas en un lugar, un bombardeo solo significaría crear una catástrofe humanitaria para quienes residen en la zona", aseveró Lavrov haciendo referencia sobre los objetivos anunciados por Donald Trump las razones del ataque aéreo el 14 de abril.

El diplomático se refirió al video que presume sirvió como base para que Francia, Reino Unido y Estados Unidos bombardearan el supuesto arsenal de armas químicas de Siria e indicó que en él se evidencia cómo personas sin protección alguna, que en algunos casos llevaban las mascarillas protectoras de gasa, regaban con agua a niños y adultos.

Expresó que militantes rusos contactaron a dos médicos que trabajaban en un hospital ese día, y que estos les indicaron que algunas personas irrumpieron gritando que se había producido un ataque químico y que todos tenían que ser regados con agua de manera urgente.

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Dijo que "nadie oculta que la escenificación grabada en el video fue organizada por los Cascos Blancos, ya que el año pasado estos activistas financiados por el Reino Unido, EE.UU. y otros países occidentales, participaron en la fabricación de una provocación parecida en la localidad siria de Jan Sheijún".

Lavrov recordó que el Ministerio de Defensa ruso encontró en Duma un almacén de armas químicas fabricadas en Alemania y en el Reino Unido, precisamente en el laboratorio de Porton Down.

Declaró que todos estos puntos fueron expuestos de manera precisa y detallada ante la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) durante una sesión del Consejo Ejecutivo y ante el Consejo de Seguridad de la ONU.

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