Un nuevo episodio de represión israelí en la aldea de Kafr Qaddum, provincia de Qalqilia en la Cisjordania ocupada dejó al menos cuatro palestinos heridos por impacto de bala.

LEA TAMBIÉN:

Reportan decenas de heridos palestinos tras represión israelí

Detallan medios locales que los soldados del régimen sionista atacaron la protesta semanal protagonizada por pobladores palestinos contra la expansión y construcción de asentamientos ilegales israelíes con balas recubiertas de goma y gases lacrimógenos.

Como consecuencia de esta nueva represión cuatro personas recibieron impactos de bala, entre ellos un niño de 13 años, herido en una de sus piernas y cuya condición fue calificada de estable por el Departamento de Emergencias de la Media Luna Roja Palestina en Qalqilia.

Además de los heridos por los proyectiles, los uniformados provocaron decenas de casos de asfixia producto de la inhalación de gases, los cuales fueron tratados en el lugar de los hechos, o trasladados a los centros hospitalarios cercanos para ser asistidos.

Estas protestas contra la construcción de asentamientos ilegales israelíes se suceden desde hace años y se cuentan en cifra cercana a los 700.000 el número de colonos que los habitan en los territorios de Jerusalén Este y Cisjordania ocupadas, violando los principios del derecho internacional.

A propósito de la represión, la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) de la Organización de Naciones Unidas (ONU) en Palestina destacó en su último informe que entre el 11 y el 24 de enero pasados unos 135 palestinos, incluidos 22 niños, resultaron heridos por las fuerzas israelíes en enfrentamientos en Cisjordania

Pormenoriza el documento que 46 de los lesionados, incluidos al menos seis niños, correspondieron a tres incidentes ocurridos en Burqa y Beita, situados en el distrito de Naplusa, y en el que los colonos israelíes asaltaron y atacaron de manera violenta a las comunidades.

Acciones respaldadas por las fuerzas represivas sionistas, las que además llevaron a cabo 88 operaciones de búsqueda y arresto que derivaron en el arresto de 148 palestinos en Cisjordania, mayoritariamente en las gobernaciones de Jerusalén y Hebrón.

Estos episodios sucesivos han encontrado rechazo por parte de la ONU y otras instituciones internacionales, así como también por parte de la comunidad internacional, como evidencian las recientes protestas en contra de la demolición de viviendas palestinas desarrolladas en Londres, Reino Unido.