Presidente de Perú niega imputaciones de presunta corrupción
La Fiscalía refiere que Pedro Castillo cometió los presuntos delitos de tráfico de influencias, encubrimiento personal en agravio del Estado y contra la administración pública.
El presidente de Perú, Pedro Castillo, negó este lunes las imputaciones por presunta corrupción en tres de los seis casos abiertos en su contra durante una diligencia que se desarrolló en la sede de la Fiscalía de la Nación, según declaró el mandatario a la salida del Ministerio Público.
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Castillo compareció ante la Fiscalía de su país, para declarar en el contexto de las investigaciones asociadas a sus presuntos vínculos con una compra irregular de biodiésel por parte de la petrolera estatal Petroperú, la destitución del ex ministro del Interior, Mariano González, y el liderazgo de una organización criminal.
La cita ante el Ministerio Público fue pactada para las 08:30 de la mañana (hora local), y era convocada para el despacho del fiscal supremo adjunto, Marco Huamán, quien indicó por medio de un comunicado que se acepta por tercera y última ocasión, la petición legal que hicieron los abogados de la defensa del mandatario para reprogramar la cita, con respecto a otros casos.
Según indica el Ministerio Público, el presidente Castillo cometió los presuntos delitos de tráfico de influencias, encubrimiento personal en agravio del Estado y contra la administración pública en la modalidad de organización criminal.
El presidente de Perú, Pedro Castillo, deberá presentarse a declarar ante la Fiscalía como parte de una investigación en su contra por los delitos de tráfico de influencias y encubrimiento personal
— Joaquín López-Dóriga (@lopezdoriga) September 4, 2022
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En julio pasado el Gobierno anunció la destitución del ministro del Interior, Mariano González, con sólo dos semanas al frente de la cartera, quien atribuyó su despido a las supuestas trabas del Ejecutivo para encontrar al exministro de Transportes y Comunicaciones, Juan Silva, al exsecretario general del despacho presidencial, Bruno Pacheco y al sobrino del Jefe de Estado, Fray Vásquez.
González refirió además que su despido está vinculado con la creación de un grupo especial de la Policía Nacional, que comanda Harvey Colchado y apoya las indagaciones del Equipo Especial de los Fiscales contra la corrupción del poder, por lo que la fiscal de la Nación, Patricia Benavides, abrió una investigación contra el mandatario peruano.
Posteriormente, Benavides inició el 22 de julio otra investigación preliminar contra Castillo por presunto tráfico de influencias ante la compra de biodiesel en favor de la empresa Heaven Petroleum Operators.
Este caso se remonta a 2021, cuando medios locales reportaron que el dignatario se reunió en la sede del Gobierno con varios empresarios peruanos de ese consorcio, tras lo cual dio inicio un proceso de venta de biodiesel B100 a Petroperú, que supuestamente benefició al empresario Samir George Abudayeh Giha con 74 millones de dólares.
Por otra parte, medios locales informan además que el mandatario peruano también responderá por la presunta coordinación de una instancia criminal que maniobraba al interior del Ministerio de Vivienda, Construcción y Sanaemiento, cuando lideraba esa cartera el actual ministro de Transportes y Comunicaciones, Geiner Alvarado.
La Fiscalía acusa tanto el presidente Castillo como al ministro Alvarado, de incurrir en el supuesto delito contra la administración pública, en la modalidad de organización criminal. Esta es la sexta investigación a la que se enfrenta el presidente peruano en menos de un año.