El Premio Nobel de la Paz 1980, el argentino Adolfo Pérez Esquivel, aseveró este viernes que teme por la vida del expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, preso político desde hace más de 300 días.

"Temo por la vida de Lula y la situación en la que se encuentra", está en medio de "sectores reaccionarios que no miden su crueldad, es gravísimo que no lo hayan dejado ir al entierro de su hermano. Es un ataque en el cual existe mucho odio", dijo Esquivel.

Estas declaraciones las ofreció el ganador del Nobel de la Paz, luego de que las autoridades de Brasil negarán al exmandatario el pasado martes 29 de enero, asistir al entierro de su hermano, Genival Inácio da Silva, quien murió a los 79 años tras padecer de cáncer de pulmón .

La acción violó el artículo 120 de la Ley de Ejecución Penal (LEP) que garantiza a quienes cumplen condena de régimen cerrado, el derecho a salir del recinto en caso de muerte o enfermedad grave del cónyuge, familiar ascendiente, descendiente o hermano.

Esquivel indica que las acciones de odio contra Lula, se dan abiertamente aún con el consentimiento y complicidad de los jueces. "La agravación del odio que existe en estos sectores, aún por encima de la complicidad de los jueces -vea que el juez que condena a Lula (Sérgio Moro) hoy es el ministro de Justicia de (Jair) Bolsonaro-, pone en evidencia que la situación no tiene nada qye ver con verdad, justicia, pero si con intereses políticos".

Lula se encuentra recluido desde el 7 de abril en la sede de la Policía Federal de Curitiba, capital del sureño estado de Paraná, donde cumple una condena de 12 años y un mes de prisión por supuesta corrupción y lavado de dinero, cargos que no han sido comprobados. 

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